Existen registros que algunas aguas del Océano Pacífico ecuatorial siguen enfriándose, esto detalla que el fenómeno de La Niña está comenzando. Sin embargo, la fecha que llegaría a Chile y el resto del mundo son inciertas. Ante esto, según información de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) la transición del fenómeno de El Niño que estuvo presente durante la mitad del 2023 y el inicio del 2024, estaría prevista para el próximo trimestre julio, agosto y septiembre. Esta transición es lo que se habla en el mundo científico como la llegada de La Niña. Asimismo, durante los próximos meses de julio, agosto y septiembre existe una alta probabilidad de transicionar a la fase de La Niña, en base al informe del International Research Institute for Climate and Society (IRI). Dado lo anterior, Meteored explicó que es probable que una vez llegue el fenómeno de La Niña, su duración se extendería hasta el primer trimestre del 2025. Se cree que su intensidad no será tan fuerte como en otros años. Finalmente, la presencia de La Niña en Chile se traduciría en pocas precipitaciones, pero hasta el momento sucede todo lo contrario.
Existen registros que algunas aguas del Océano Pacífico ecuatorial siguen enfriándose, esto detalla que el fenómeno de La Niña está comenzando. Sin embargo, la fecha que llegaría a Chile y el resto del mundo son inciertas. Ante esto, según información de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) la transición del fenómeno de El Niño que estuvo presente durante la mitad del 2023 y el inicio del 2024, estaría prevista para el próximo trimestre julio, agosto y septiembre. Esta transición es lo que se habla en el mundo científico como la llegada de La Niña. Asimismo, durante los próximos meses de julio, agosto y septiembre existe una alta probabilidad de transicionar a la fase de La Niña, en base al informe del International Research Institute for Climate and Society (IRI). Dado lo anterior, Meteored explicó que es probable que una vez llegue el fenómeno de La Niña, su duración se extendería hasta el primer trimestre del 2025. Se cree que su intensidad no será tan fuerte como en otros años. Finalmente, la presencia de La Niña en Chile se traduciría en pocas precipitaciones, pero hasta el momento sucede todo lo contrario.